Juan Manuel Reyes Cruz 22 de marzo de 2013.
Laredo Texas. Durante años, la expedición de cheques calientes, denominados de esa manera a cheques sin fondos, se consideraba una enfermedad para quienes pagaban compras y no contaban con suficiente dinero, aún persiste. El fiscal de distrito de Laredo, Zapata y San Ignacio Texas, Isidro Alaníz, dijo que de cada 10 compradores que giran cheques sin fondos, 1 de éllos es del Estado de Nuevo León y de esos 10, la mitad son mexicanos que viven en ambos lados de la frontera. Los castigos van desde dos años hasta 10 años en prisión y multas de hasta 100 mil dólares, dependiendo la cantidad firmada en un cheque que de antemano se sabe no cuenta con dinero suficiente para respaldar las deudas, pero hay quienes persisten en actuar de esa manera. “Nosotros realizamos amnistías a quienes tienen ese problema, no es nuestra intención meter a la cárcel a quien gira cheques sin fondo, pero la ley es clara y tenemos que actuar, una vez que identificamos a esas personas, les damos un tiempo pertinente de hasta 30 días para pagar, si no lo hacen entonces los llevamos ante un juez y el decidirá que castigo imponer” dijo a IMAGEN MULTIMEDIA, el fiscal de distrito en Texas. Se sabe por estadísticas que el 10 por ciento de giradores de cheques calientes son originarios del Estado de Nuevo León en México, y son personas dueños o representantes de empresas, los cheques girados son por miles de dólares, pero si no pagan, son reportados al servicio de aduanas y protección fronteriza y al regresar a Estados Unidos, son arrestados. “Entonces resulta más caro, porque hay que pagar una fianza muy alta para salir en libertad condicionada, además de los gastos de la corte y contratación de abogados, por eso es mejor que lleguen a un arreglo para saber cómo pagar esos cheques calientes que ya tenemos detectados” dijo el fiscal.
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