Se fueron a vivir a Texas, al ser extorsionados por grupos criminales. Su intención es volver a Tamaulipas y confían en el gobierno de Peña Nieto
NUEVO LAREDO, 4 de noviembre.- Un grupo de empresarios con doble nacionalidad que residen en Laredo, Texas, originarios de las ciudades de Nuevo Laredo, Reynosa, Tampico, Victoria y otras entidades de Tamaulipas, sostuvieron una reunión con el presidente del PRI estatal, Ramiro Ramos Salinas, para solicitarle que la inseguridad disminuya y poder regresar al estado que los vio nacer.
La llegada del nuevo presidente de México, Enrique Peña Nieto, hace abrigar esperanzas a quienes han sido víctimas de secuestro, robo, golpes, o extorsión, por personas que se hacen pasar por grupos criminales, a quienes han entregado miles de pesos o dólares, a cambio de dejarlos en paz o liberar a familiares secuestrados.
Empresarios, gerentes de bancos incluso de Laredo, Texas −a donde ya llegaron las extorsiones−; dueños de constructoras, y representantes de empresas internacionales, sostuvieron una reunión privada con Ramos Salinas, que busca acercamientos con quienes huyeron del país para buscar la tranquilidad que no encuentran en Tamaulipas.
En la reunión −a la cual tuvo acceso solamente Grupo Imagen Multimedia−, Ramos Salinas tomó nota de cada uno de los comentarios vertidos por los presentes, a quienes les prometió hacer llegar sus inquietudes al gobernador Egidio Torre Cantú, que este lunes llegará a Nuevo Laredo para entregar diversas obras.
“Si el nuevo gobierno le invierte en educación y mejores policías, se podrá terminar con las extorsiones de las que hemos sido víctimas. Es triste que huyamos de nuestro propio país, porque no hay autoridad que nos pueda ayudar, porque la corrupción está apoderada de todas las instancias judiciales.
“Todos, o por lo menos la mayoría de los aquí presentes, hemos sido víctimas de gente sin escrúpulos, que se mete a nuestras casas para violar nuestras mujeres, robarnos y todavía amenazarnos para que no los denunciemos. ¿Y para qué los denunciamos?, si las autoridades no hacen nada, sólo te traen vuelta y vuelta de agencia en agencia del Ministerio Público, para después pedirte que retires la denuncia, si no te va peor”, comentó un gerente de un banco tamaulipeco, de quien se omite su sombre.
Un empresario fue más claro al asegurar que huyó de la frontera mexicana y que, al enterarse quienes lo extorsionaban, tomaron represalias contra sus trabajadores. “Quienes obviamente no se pueden defender, no tienen dinero para pagar extorsiones y menos para vivir en el lado americano”, aseguró.
Cuatro de los autoexiliados dijeron haber pagado cantidades de 100 mil hasta 5 millones de pesos para recuperar su libertad o la de algún familiar.
La mayoría aseguró que una vez que disminuya la inseguridad, regresarán a sus casas, ya que son mexicanos y desean vivir en paz.
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