Juan Manuel Reyes Cruz 9 de mayo de 2014.
Una fuerte tormenta acompañada de granizo que alcanzó
ráfagas de vientos con velocidades de hasta 65 kilómetros por hora, azotó a
Nuevo Laredo, la tarde de este VIERNES. Durante más de 30 minutos, la lluvia pegó
fuerte en la frontera, dejando calles inundadas y árboles derribados por el fenómeno
que se sintió y llegó de manera repentina. Automovilistas y transeúntes, se sorprendieron
cuando en menos de 10 minutos, el cielo se oscureció a las 17:30 horas de este VIERNES, para dar paso, primero a una pertinaz lluvia, luego fuertes vientos y en
unos cuantos minutos, la caída de granizo.. En diferentes lugares de la ciudad,
varios carros se quedaron varados, ya que sus distribuidores fueron dañados por
la tormenta que duró aproximadamente media hora.
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